¿Qué es un proyecto?
Todo gestor de proyectos sabe que la selección de la metodología adecuada es crucial para hacer bien el trabajo. Aunque hay muchas metodologías de gestión de proyectos, hemos reducido la lista a siete de las más populares y a las más adecuadas.
Según el Instituto de Gestión de Proyectos (PMI), una metodología se define como «un sistema de prácticas, técnicas, procedimientos y reglas utilizadas por quienes trabajan en una disciplina». Las prácticas Lean, Kanban y Six Sigma son ejemplos de metodologías de gestión de proyectos».
Son esencialmente procesos que pretenden ayudar a los gestores de proyectos con la orientación a lo largo del proyecto, y los pasos a seguir para completar las tareas. Las distintas metodologías tienen diferentes estrategias que ayudan a gestionar los problemas que puedan surgir durante la ejecución del proyecto.
Hay muchas metodologías entre las que elegir, cada una con su propio conjunto de reglas, principios, procesos y prácticas. La metodología que debe aplicar depende totalmente del tipo de proyecto que vaya a emprender. El objetivo de seleccionar una metodología de gestión de proyectos es maximizar el uso de los recursos y el tiempo.
Gestión ágil de proyectos
Sin duda, la metodología de gestión de proyectos es una parte esencial de cualquier proyecto, ya que todos los negocios y empresas la utilizan para mejorar el rendimiento de sus proyectos. Dado que existen muchas metodologías de gestión de proyectos de software, además de la tradicional metodología ágil, puede resultar difícil seleccionar la más adecuada.
Teniendo esto en cuenta, el siguiente artículo le ayudará a comprender mejor algunos aspectos de las metodologías de gestión de proyectos más populares, aparte de la tradicional Agile. Además, con nuestros consejos para elegir la metodología de gestión de proyectos adecuada, podrá hacer su elección fácilmente y alcanzar sus objetivos empresariales.
En una definición restrictiva, el desarrollo de software es sólo un proceso de escritura y mantenimiento de códigos. Sin embargo, un verdadero proyecto de desarrollo de software abarca muchas más tareas, desde la investigación y la conceptualización de ideas hasta el lanzamiento, el mantenimiento y la mejora de los resultados finales.
El desarrollo de software ya no es un trabajo exclusivo de los ingenieros de software, sino que implica a muchas otras partes interesadas, como los diseñadores de UI/UX o los analistas de negocio, y por lo tanto conlleva un mayor nivel de complejidad. Por lo tanto, la gestión del desarrollo de software es esencial, independientemente del alcance del proyecto. Este proceso implica varios principios y prácticas, empezando por los parámetros de entrada especificados por los clientes e incluso pegando después de que el software salga al mercado.
Metodología de trabajo
Entre los ejemplos concretos de metodologías de gestión de proyectos -cada una con sus ventajas y limitaciones únicas- se encuentran, entre otros, Agile, Waterfall, Critical Path, Scrum, Lean Six Sigma y PRINCE2.
Definida como «la aplicación de conocimientos, habilidades, herramientas y técnicas a las actividades del proyecto para cumplir sus requisitos», la gestión de proyectos «siempre se ha practicado de manera informal», según el Project Management Institute® (PMI), la principal asociación profesional de gestores de proyectos. Sin embargo, a medida que «la economía mundial se ha ido orientando más hacia los proyectos», la necesidad de gestores de proyectos cualificados ha crecido de forma espectacular, según el PMI (fuente PMI pdf).
Aunque ninguna metodología de gestión de proyectos funciona a la perfección en todas las ocasiones, un estudio publicado en 2015 en el «International Journal of Project Management» demostró que existe una relación positiva entre el uso de una metodología de gestión de proyectos y la consecución del éxito del proyecto. De hecho, los autores descubrieron que la «aplicación de una PMM (metodología de gestión de proyectos) explica el 22% de la variación en el éxito del proyecto.»
Gestión de proyectos en cascada
Hay varias razones, desde un cambio en las prioridades de la organización y los objetivos del proyecto hasta la procrastinación y la dependencia de las tareas. Pero la mayoría de ellas apuntan a un factor común: la falta de una dirección clara.
La metodología de gestión de proyectos ofrece una hoja de ruta clara que enumera todos los pasos necesarios para llevar a cabo un proyecto con éxito. Estas metodologías o técnicas de proyecto proporcionan una estructura de gobierno definida, directrices de proceso, actividades de prueba, procesos y resultados. Adoptan un enfoque bien detallado, rígido y repetible de la gestión de proyectos.
El marco de gestión de proyectos proporciona estructura y dirección a un proyecto. Sin embargo, a diferencia de las metodologías de gestión de proyectos, no es ni demasiado detallado ni demasiado rígido. Los marcos guían a los proyectos hacia su objetivo al tiempo que son lo suficientemente flexibles como para adaptarse a la evolución de las condiciones.
Por ejemplo, la mayoría de los expertos consideran que la «Metodología Ágil» es un marco a pesar de que su nombre dice metodología. Esto sólo demuestra que, por muy exhaustiva que sea su clasificación, puede considerarse arbitraria.